
Sientocómo se detiene mi cuerpo
dejándome a merced de mis recuerdos,
encadenado a una fugaz memoria
que antes resurgía de mis cenizas
y ahora se desvanece en la niebla.
Palpomi gélida e indolente alma
vaciándome de aquellos hermosos sueños
que me inundaban de esperanzas
y ahora solo son tenebrosas pesadillas
que agitan mis noches de soledad infinita.
Noto mi corazón desarmado y herido
dejando lentamente de palpitar
por todo aquello que amaba hasta el delirio
y ahora desama sin cordura
templando pasiones sin llama ni vértigo.
Percibo la fría oquedad de esos mis ojos
que transitan a tientas sin mirar hacía atrás,
dejando a ciegas los hermosos recuerdos
que alentaban mi vida sin pedir nada a cambio
y ahora se esconden entre tinieblas sombrías.
Intento escuchar mi voz susurrándome al oído
pero son gritos sordos que amordazan mis palabras,
diciendo nada de lo que antes…
Ver la entrada original 12 palabras más