
Para leer…
Me fluyen las palabras
entre los dedos de las manos,
y se transforman en versos
navegando libres y sueltos
por un océano de tinta
que inunda páginas en blanco.
Arden las palabras
que de mí nacen,
y se funden en tu boca
al escribirlas en un beso
que destila el sabor a miel
que exhalan tus labios.
Me brotan las palabras
sin que yo las llame
para recordarme que vivo,
que simplemente te amo,
que sin ti el tiempo se derrite
en un puñado de suspiros.
Grito palabras a los cuatro vientos
para que alguien las escuche.
Me sobran silencios
para decir lo que deseo.
Me faltan palabras
para no callar lo que siento.
Necesito palabras
que abracen mis penas,
que aquieten mis miedos,
que acudan al rescate
de los temores que me asaltan
cuando la vida me da la espalda.
Me bebo las palabras
que emanan a borbotones
del manantial invisible
que anega mi cuerpo,
de las aguas turbulentas
que empapan mis entrañas.
Me hacen falta palabras
para construir castillos en el aire
y sembrar la tierra de nubes
que inunden de lluvia
los corazones solitarios
que de amor andan yermos.
Me pierdo entre palabras
buscando una puerta de salida
a las tristezas que me ahogan,
a las heridas que me desangran,
a las pesadillas que me desvelan
en noches intempestivas.
Se me clavan las palabras
como dagas de fuego
que me arden por dentro,
como espigas de hielo
que me congelan el alma
cuando una pasión fenece.
Me delatan las palabras,
me suplican que confiese
los pecados que cometo
sin arrepentirme de nada,
los sueños que se desvanecen
con el clarear de la mañana.
Me sofocan las palabras
que no expresan lo que siento,
las que esconden mis lamentos,
las que me desdicen en secreto,
aquellas que me traicionan
al ponerlas por escrito.
Sin palabras no me encuentro,
solo soy una voz callada
que arde en deseos de amar,
de declararme en rebeldía,
de querer transitar por la vida
con más premura que sosiego.
Para escuchar…
Incluido en Más que palabras (Ediciones Rilke, 2025), «un poemario íntimo, en el que las palabras se convierten en vehículo de exploración personal y reflexión profunda» (Revista Poesía eres tú).
Poema publicado también en la revista latinoamericana Mal de ojo.